Este poemario es un libro de ficción, aunque yo no lo sabía cuando lo escribí. Cada vez que aparezca la expresión el mar, debe sustituirse ésta mentalmente por el mal y será mucho más fiel a la realidad. Léase con los pies aferrados a la orilla y el espíritu protegido de la bruma marina.
También te puede interesar
Cuando la voz se tambalea ante un anhelo, la poesía sostiene los pilares del puente que nos conduce al destino. Esta semana, […]
Casi siete años después de mi debut editorial con Dialéctica de ojos, ¡he vestido a mi primogénito con un nuevo traje! De […]
Nos dan a luz con sombras, decenas de matices que nos persiguen aspirando el fuego durante la existencia. Por nosotros deciden lo […]
La Poesía es una confesión de la naturaleza, pues ella no alberga nada inerte. El Poeta escucha y se reconoce como parte […]